La popular marca francesa de equipamiento y ropa deportiva ha presentado la que va a ser su nueva identidad desde septiembre. Dentro de los cambios se pueden apreciar modificaciones en los colores y estructura de la compañía, pero también en el propio logo. Analizamos el rebranding de Decathlon y lo que significa.
Todos los cambios en Decathlon
A primera vista se pueden apreciar algunos de los cambios más evidentes. Enseguida llama la atención la evolución del clásico tono azul claro de Decathlon hacia un color algo más oscuro. La tipografía se mantiene muy similar, con la característica unión entre la tercera y cuarta letra. Pero en esta ocasión, vemos un logo antes del texto. Este nuevo símbolo que se ha integrado en el logo recibe el nombre de “The Orbit”. Todo indica que estos cambios estarán presentes en los locales de la empresa pero también en los propios productos. Aunque la tipografía parezca casi idéntica, vemos cómo la han pulido para ser ligeramente más fina. Esto forma parte de la nueva tipografía llamada Decathlon Sans que estará presente en toda su comunicación. Los cambios en la imagen corporativa responden a nuevas estrategias dentro de su propia estructura. Vemos como Decathlon va a reducir sus marcas propias, apostando solo por las más fuertes como Quechua, Tribord, Rockrider, Domyos, Kipsta, Btwin… Ya se sabe que los cambios son necesarios, sobre todo para sobrevivir siendo líder en un sector. Ya podemos ver el nuevo logo en algunas de sus redes y campañas.
¿Por qué las grandes empresas deciden cambiar su imagen?
A veces cuesta entender que decidan modificar su logo o sus colores corporativos grandes compañías con una imagen muy reconocible. ¿A qué se debe? Lo cierto es que las marcas, independientemente de su tamaño, deben seguir esforzándose por crecer y mantenerse en la mente de los consumidores. Cuando las empresas cumplen bastantes años, comienza a ser necesario demostrar que son suficientemente ágiles para seguir estando a la moda. Y ser capaces de adaptarse a los cambios es una de las claves. Sin embargo, esta capacidad de cambio muchas veces cuesta exteriorizarla. Por esta razón, se apuesta por actualizar el logo o la comunicación de la marca. Todo cuenta para transmitir ese dinamismo y energía. Al fin y al cabo, el mercado está en constante cambio. Las empresas que no cambian corren el riesgo de parecer obsoletas. Pero como siempre, hay que hacerlo con mucho tacto. Sobre todo cuando algo funciona. La imagen corporativa muchas veces representa uno de los recursos intangibles más valiosos de una empresa. ¿Cuánto vale el logo de Nike, o el de Coca-Cola? Y aun así, incluso estas marcas han trabajado en modernizarse. El branding es claramente todo un mundo, y conviene contar con profesionales para tomar las decisiones acertadas. Incluso si eres una gran empresa.