Con la presentación de Samsung del Galaxy Ring en el Mobile, parece que los anillos inteligentes son el siguiente paso en los wearables. Apple ya ha demostrado con las Vision Pro que está dispuesta a competir con nuevos tipos de dispositivos. ¿Estarán trabajando en desarrollar un anillo inteligente los sucesores de Steve Jobs? Desde luego concuerda con su filosofía inconformista…
iRing o Apple Ring
El secretismo dentro de las oficinas de Apple es algo que caracteriza a la compañía. Al fin y al cabo, ya hemos hablado muchas veces del poder revolucionario que tiene Apple en la industria tecnológica. A pesar del hermetismo, se rumorea con que los de Cupertino tienen prototipos de dispositivos muy diversos. Esta semana se ha desestimado la posibilidad de que un Apple Car vaya a ver la luz pronto, centrándose la compañía en otros proyectos como la implementación de la IA. Sin embargo, el mercado de los wearables parece estar evolucionando rápidamente hacia los anillos, y no quieren quedarse atrás con sus Apple Watches. La entrada de Samsung en este sector cimenta su creciente importancia, junto con los grandes pasos de otras marcas como Oura o Amazfit. Igual que ha sucedido con las gafas de realidad virtual, si estos dispositivos nuevos son lo siguiente, no quieren quedarse atrás. Además estamos ante un año (2023) en el que los ingresos anuales de Apple han disminuido. Las decisiones que tome la compañía seguro que estarán condicionadas por este fenómeno.
¿Podría ser un anillo inteligente un acierto para Apple?
Por un lado, Apple ya tiene una línea de dispositivos portátiles centrados en las mediciones de salud con sus smartwatches. Lanzar un anillo inteligente podría perjudicar las ventas de estos dispositivos. Además, las ventajas de los anillos inteligentes residen en su tamaño y precio asequible, algo que al usuario de Apple podría no importarle tanto. El ejemplo más claro son las Vision Pro. De hecho, este dispositivo ha demostrado que los anillos inteligentes no son necesarios dentro de la computación espacial ya que las gafas son capaces de reconocer con sus propios sensores el movimiento de las manos. Sin embargo, los de Apple seguro que serían capaces de encontrar la forma de revolucionar el mercado de los anillos inteligentes si optasen por desarrollar uno. Y pese a que el precio actual de estos dispositivos ronda entre los 100 y los 400 dólares, también es bien sabido que los de Apple son capaces de justificar precios muy por encima de sus competidores.
Con las características adecuadas, no podemos descartar que un Apple Ring pueda ser todo un éxito. Y si le sumamos la integración en el ecosistema de la compañía, no sería nada descabellado que ofrezca grandes ventajas a la hora de interactuar con sus demás dispositivos. En cualquier caso, por lo menos hasta 2025 es altamente improbable que vayamos a ver ninguna apuesta tan atrevida como esta por parte de Apple. Mientras tanto podemos seguir hipotetizando sobre su aspecto, con ayuda de la IA por supuesto.