Con el comienzo del nuevo curso académico, muchas empresas e instituciones se plantean sumarse al trabajo remoto, o por lo menos de forma parcial. Un nuevo estudio realizado por Deloitte demuestra que cada vez más trabajadores prefieren el modelo híbrido. Repasamos los resultados de este estudio y las principales ventajas del teletrabajo. ¿Tú lo practicas?
Deloitte 2023 Connected Consumer Survey
En EEUU, después del famoso Labor Day, muchas empresas como Meta, Zoom y Amazon, adoptan nuevas políticas con respecto al regreso a las oficinas. Pero una nueva investigación conducida por Deloitte demuestra que la mayoría de trabajadores en realidad prefiere quedarse en casa, o por lo menos una parte de los días de la semana. La encuesta de Deloitte entrevistó a 2,018 profesionales en EEUU para conocer sus impresiones sobre la vida digital. Los encuestados apuntan a que los trabajadores reciben mayores beneficios trabajando en remoto o en un formato híbrido. Además, las cifras apuntan hacia una inclinación que se está volviendo mayoritaria. Un 56% de los adultos empleados trabajaron de forma remota o híbrida en el último año. De estos, un 45% aseguró que al trabajar más desde casa mejoraron sus relaciones familiares, y un 40% dijo que su estado de ánimo también se vió repercutido positivamente.
Está claro que un equipo con una buena situación familiar y personal es mucho más eficiente y productivo. Si esto se puede lograr en gran medida tan solo con un modelo de trabajo diferente, las conclusiones de Deloitte son de gran interés para todas las empresas. En esta misma encuesta, también observaron que 8 de cada 10 trabajadores híbridos mantuvieron o mejoraron la relación con sus familiares, compañeros y jefes desde que empezaron a ir menos a la oficina. Los resultados del estudio se pueden comparar con el año anterior para observar cuáles son las principales tendencias. Aquellos que prefieren la presencialidad total o mayoritaria han descendido de un 44% en 2022 a un 37% este año. De la misma forma, los que prefieren un modelo híbrido o blend han aumentado de un 21% a un 28%.
El mismo fenómeno se puede observar en la educación. Este año un 52% de los estudiantes online desean seguir aprendiendo de forma remota o hacerlo en el futuro. Esto supone un 11% más que en 2022. Al fin y al cabo, además de la comodidad que fomenta la conciliación laboral y familiar, estudiar y trabajar en remoto supone una reducción considerable en los costes, tanto para los empleados como para las empresas.
Las ventajas del formato híbrido
Con la pandemia todo se tuvo que volver remoto de forma forzosa, pero supimos encontrar el lado positivo de poder estudiar y trabajar desde casa. Sin embargo, el contacto humano y la presencialidad es de forma innegable clave en muchas ocasiones. Tanto para afianzar las relaciones con los compañeros y superiores, como para tratar con un cliente, hay algo único en poder hacerlo cara a cara. Pero si se fusionan las ventajas de ambos modelos, se obtiene un formato híbrido que lógicamente triunfa. Por un lado, ir solo unos días a la oficina ofrece la reducción de costes de transporte y alimentación mientras que mantiene un trato cercano con las personas del entorno laboral o académico. En el momento que existe esa conexión de forma presencial con las personas, es mucho más sencillo poder trabajar de forma online posteriormente. Por otra parte, los modelos flexibles permiten a los empleados organizarse su propio horario de tal forma que pueden atender sus obligaciones profesionales sin descuidar las tareas del hogar o los proyectos personales. Para la paternidad y maternidad, se ha convertido en un modelo revolucionario.
Por su parte, las empresas se pueden beneficiar del modelo híbrido de forma similar. Pueden aprovechar la presencialidad concentrada para realizar actividades de team-building y fomentar un buen clima laboral. Además, cada vez más clientes prefieren interactuar de forma digital, por lo que las empresas pueden adaptarse a lo que requiera cada uno. En cuanto a la reducción de costes, si se apuesta por unas oficinas de coworking, o compartidas, es posible minimizar los considerables gastos que supone mantener un inmueble. En un entorno laboral cada vez más orientado a buscar la felicidad y bienestar de los stakeholders, cabe esperar que el modelo híbrido no pare de crecer. Encima, el que lo prueba ya no quiere volver atrás.