En un mundo en el que cada vez más negocios cuidan sus redes y parecen usar las mismas plantillas, existe un fenómeno que triunfa por su naturalidad y cercanía. Principalmente los negocios locales, logran transmitir un tono cómico y sincero en redes mediante una sencilla fórmula. Gracias a ello, muchas veces son capaces de diferenciarse y conseguir muchos más seguidores. Repasamos algunos de los ejemplos más curiosos del éxito de lo “cutre”, porque en realidad esconde un trabajo mucho mayor de lo que parece.
Un sastre de Talavera
En este caso el desparpajo y las habilidades comunicativas de Ángel Rivas es lo que ha puesto a este negocio de ropa para caballeros en el mapa. Con tan solo 28 años, el sastre que se ha convertido en influencer ha conseguido miles de seguidores y conocer a su ídolo Ibai Llanos. No solo eso, sino que pudo obsequiarle con una camisa de cerámica, en honor al producto insignia de su tierra. Mediante el negocio familiar que tiene con su padre, ha logrado crear su propia marca, Empíreo, y ser galardonado con el premio de la Aguja de Cerámica. Lejos de tener una producción o diseño punteros, logra conectar con su público mediante divertidos videos hablando a la cámara en su tienda. Mediante chistes, música de moda y una estética “canalla pero elegante” logra despertar un gran interés que va más allá de la ciudad manchega. Quizás sin saberlo, realiza un marketing muy atractivo para los jóvenes y con gran potencial para volverse viral en redes. Si quieres ver sus vídeos no te pierdas su Instagram, y ahora también sus directos en Twitch.
Una tienda de cervezas de Madrid
Un tipo de negocio que está triunfando en los últimos años son las licorerías especializadas en cervezas. Con un mercado cada vez más saturado por las mismas marcas nacionales e internacionales, a los más sibaritas les resulta muy interesante poder probar cervezas muy diferentes. Esto es lo que ofrece Masquecervezas en el centro de la capital. Mediante entretenidos videos diarios en redes, los propietarios de esta tienda encuentran maneras muy originales de promocionar sus nuevos productos. Con un flujo constante de cervezas limitadas y ciertamente difíciles de encontrar, logran atraer a muchos compradores por su buen sentido del humor y criterio cervecero. Su presencia en redes no se limita a un contenido frecuente en Instagram, sino que responden a todos los usuarios de manera personalizada en WhatsApp. No solo te ayudan a encontrar las cervezas que puedas estar buscando, sino que también te hacen una selección solo para tí en base de tus gustos. Ciertamente, sus redes son una representación muy certera de su trato humano y sincero. Nuevamente, quizás sin hacerlo a propósito, son capaces de cuidar a sus clientes mejor que cualquier multinacional.
Una librería de Pontevedra
De los ejemplos que muestra este artículo, el que despierta una mayor sensación online es curiosamente una librería de cómics. Con más de 43 mil seguidores en Instagram, Librería Baroja captura a la perfección la esencia de lo “cutre”, y es capaz de cautivar a los jóvenes lectores, uno de los principales retos del sector. Pero donde verdaderamente triunfa su propietario, Fernando Iglesias, es en TIkTok, con cerca de 100 mil seguidores y varios videos que superan con creces el millón de reproducciones. Sube contenido casi a diario donde muestra las últimas entregas en llegar a la tienda, y las recomienda con un formidable entusiasmo. Sus videos más virales son muy breves, y se limita a comparar grandes obras literarias con lo que considera los mejores cómics y mangas. “Está bien que leáis Hamlet en el instituto, sin embargo estaría mucho mejor que leyeras JoJos como gran obra maestra del noveno arte”. En su cuenta muchas veces aparecen los clientes de la tienda que están viniendo de todo el mundo para conocer al curioso personaje detrás de la Librería Baroja. Cómo siempre se despide Fernando: “Es un placer serte útil”.
Las claves de lo “cutre”
Entre estos tres ejemplos existen unas similitudes que podemos encontrar en muchos otros negocios que triunfan online por su sencillez y estilo cercano. En primer lugar, el tratamiento del humor es muy acertado, sin miedo a ser el chiste, pero al mismo tiempo transmitiendo las ventajas y calidad de sus productos en todo momento. Mediante planos tomados con el móvil, nos recuerdan a un vídeo que podría estar enviándonos un amigo o un conocido, y esto hace que nos paremos a verlo. El interlocutor juega un papel muy importante, ya que su expresividad y labia son claves para crear esta estética. Frecuentemente, lo que se busca es crear un personaje que se vuelva viral pero que también puedas conocer personalmente si vas a la tienda física. Hacen falta una mezcla de habilidades como vendedor, comunicador y humorista, algo mucho más difícil de lo que pueda parecer. Y sin reparo alguno a estar frente a una cámara, por supuesto.
Por otra parte, la frecuencia del contenido compensa la calidad “casera” de los videos, ya que suele ser prácticamente diaria. Mediante constancia y paciencia, estos negocios son capaces de crear una comunidad fiel de seguidores que no duda en recomendar a sus conocidos estos establecimientos. No es un secreto la importancia del boca-oreja en el marketing, y en un mundo lleno de prosumidores, esta resulta una clave esencial para la supervivencia de un negocio. Finalmente, los clientes buscan el trato humano y lo agradecen, sobre todo cuando se vuelve cada vez menos frecuente. En cierto modo, la estética “cutre” simplemente es una parte de lo humano, que no deja de cautivar pese a sus más y sus menos. La moraleja es que tenemos mucho que aprender todavía de los negocios locales, incluso en lo que se refiera al marketing digital.
