Ahora que se acerca la navidad, es habitual desempolvar clásicos del cine como el mítico “Solo en Casa” que catapultó a la fama a un jovencísimo Macaulay Culkin. Google se ha permitido revisitar este clásico con un Macaulay Culkin adulto que ahora tiene el asistente de Google para disfrutar de su hogar y defenderse de los ladrones.
Anuncio de Google con Macaulay Culkin
Con solo ver la fachada de la inolvidable casa de la película, el anuncio nos transporta a las navidades de hace tres décadas. Porque aunque parezca mentira, han pasado 33 años desde aquella primera película, que también han pasado por su protagonista. Vemos a un Macaulay Culkin que vuelve a casa de nuevo para encontrarse solo, sin sus padres. Pero en esta ocasión, cuenta con el asistente de Google para defenderse a la perfección. Vemos como revisita las mismas actividades que hacía de jóven, pero en esta ocasión repitiendo “Hey Google” para establecer recordatorios o atender al cartero. Es cierto que esta vez le duele la espalda al saltar en la cama, ya que hace mucho de sus tiempos como actor infantil. Al final, vemos como gracias a Google Assitante, por supuesto, logra activar un plan maestro con su aspiradora inteligente para alejar a los ladrones de la casa. Desde luego, hoy en día sería mucho menos probable que un niño solo en casa tuviese que luchar contra unos ladrones como en aquella película. Algo que podemos agradecer a la tecnología, como muestra el anuncio.
La clave de usar celebridades en los anuncios
Google claramente aprovecha la nostalgia de muchos que crecieron con aquel film navideño para promocionar su asistente. Y por supuesto, cuenta con una celebridad como Macaulay Culkin para lograr credibilidad. Al fin y al cabo, sin el actor original el anuncio no tendría nada de especial. Esta es una estrategia recurrente entre los anunciantes, que buscan la fama de grandes personalidades públicas para vender sus productos. El uso de celebridades en anuncios es una táctica de marketing probada que puede ser extremadamente efectiva debido al fenómeno conocido como transferencia de significado. La fama, el atractivo y la credibilidad de una celebridad pueden transferirse a un producto o marca, aumentando su atractivo para los consumidores. Muchas veces un producto puede triunfar simplemente porque una persona muy influyente lo haya recomendado o sea la imagen de una marca. También por esta razón los famosos reciben ofertas millonarias por parte de las marcas para ser sus embajadores.
Sin embargo, hay consideraciones importantes a tener en cuenta, como la alineación entre los valores de la celebridad y la marca, el riesgo de sobreexposición de la celebridad y el potencial de controversia o cambio en la percepción pública que podría afectar negativamente a la marca. No podemos olvidar que Macaulay Culkin ha sido una de las estrellas con mayor controversia y polémica a sus espaldas. Cuando una marca decide apostar por un personaje así, debe medir muy bien los riesgos ya que puede acabar desprestigiando su imagen. Además, los consumidores se están volviendo cada vez más escépticos sobre los anuncios de celebridades, lo que puede hacer que este enfoque sea menos efectivo si no se realiza de manera auténtica y transparente. En esta ocasión, parece que Google logró una campaña navideña exitosa, pero no siempre ha sido el caso con el uso de celebridades.